116. ¿Vivimos en una sociedad corrupta…?

 

Una sociedad en la que desde que nacemos no educan en la mentira y que entre quienes nos ayudan a crecer tienen en común hacernos creer cientos de cosas que en realidad son mentira y que cuando no damos cuenta de que son mentiras tantas mentiras nos conformamos y las justificamos, lo normal es que esta sociedad si no corrupta está enferma.

 

Vivimos en una sociedad que está construida con los desperdicios de todos los poderes que por aquí ha habido en los últimos ochenta años en los que la injusticia y la hipocresía han sin sus amalgamas.

 

A la población de manera individual y colectiva se le ha enseñado en aprovechar en nuestro beneficio cualquier ventaja que se nos presentara ante cualquier circunstancia sin mirar a quién perjudicamos.

 

Habitamos una sociedad que pareciera haber tocado fondo a finales del siglo XXI cuando de una manera autocritica reconoció que si hacía por perder perdería pero que parece seguir por la misma cuesta abajo.

 

·    La monarquía incuestionable e incuestionada representada que son la corrupción personificada y que sin embargo que aquí los tenemos que soportar porque dicen que así lo quisieron nuestros padres.

 

·    El dictador y sus herederos que todavía tienen su presencia en la práctica política estructural y diaria y que se revuelven amenazantes con echarnos a reñir de nuevo para que sepamos lo que es bueno.

 

·    Aquellos partidos que se acobardaron y tuvieron prisa en que les hicieran hueco en la mesa del poder para probar sus primeras viandas y que su mayor nivel de corrupción fue perdonar la vida a la dictadura.

 

·    La Iglesia católica que con sus prebendas sigue teniendo el control y el equilibrio de poderes que supone: dar al cesar los que es del cesar y a dios lo que es de dios, representando ella misma a los dos.

 

·    La historia que se atraviesa con la memoria y que se ha torcido de tal manera que nuestra patria es la mejor de entre las mejores, y hasta el punto de que el ADN español no tiene parangón en el mundo.

 

Con estas mimbres que hemos separado, posiblemente antes de calificar de corrupta la sociedad en la que vivimos, que quizás merezca otro calificativo, habremos de creer que lo que hay son muchos corruptores en el ámbito social y político en el que naufragamos.

 


93. ¿Acabará la moción de censura con el franquismo…?

La moción de censura, en apariencia con la idea de acabar con el viejo régimen representado por el Partido Popular, y las circunstanciales cuestiones de corrupción, habremos de ver: si también acaba de una vez con el franquismo todavía latente en toda su extensión en el régimen.

Los ocho pilares base del franquismo que son los que garantizan su supervivencia y que intocables e inmutables son los siguientes:

España y su unidad sagrada y en la medida en la que se deje a la libre determinación de quienes viven en Catalunya, será la línea más difícil de traspasar para acabar con el pilar mas principal del régimen.

La Monarquía que el régimen ha asentado en el último momento, incluso en medio de una gran corrupción económica y política ¿se pondrá en cuestión aunque sea nada más con un referéndum consultivo?

El entramado económico viejo, esperpéntico y chapucero que nos lleva empobreciendo en los últimos diez años ¿alguien será capaz de ir a meollo de la cuestión para no seguir empobreciéndonos otros diez…?

Las fuerzas armadas y el aparato judicial que cada día demuestra su poderío y su impunidad contra la población ¿serán cuestionados por ejemplo en el caso de los chicos de Altsasu...?

La Iglesia Católica que ha incrementado su poder en las últimas décadas sin necesidad de trascendencia divina ¿será capaz el nuevo poder de poner coto a su poder cultural, social, político y económico...?

Las fiestas populares y el ocio embrutecedor que ocultan ¿habrá voluntad de que no se celebren fiestas en cada lugar en nombre de la Iglesia, sin practicar la cultura criminal y quitando el fondo machista…?

Los sindicatos verticales y su propulsión del cambio del sistema productivo por el que se amplia la base de personas con obligación de trabajar, con jornales de miseria y sin afectar qué y cuánto produzcan…

La pobreza moral y económica que sigue manteniendo como una fuente del orgullo patrio ¿este cambio político trazará los camino para llegar a arrasar la ignorancia secular y las mentiras endémicas…?

Estos pilares fueron alicatados hace cuarenta años y todavía están vigentes y quizás hasta mejor asentados, acabar con ellos nos va a costar pero: ¿diseñará la nueva mayoría como ha de ser su derrumbe…?

 


88. La senda que nos señala Catalunya.

Catalunya y sus gentes ya llevan su sendero aunque no sea visible.

Catalunya ya es una República en la medida en la que la realidad y el histrionismo castellano lo permite y saltando por encima de todo el desprecio con el que es tratado por la inmensa mayoría de los medios de comunicación desde una prepotencia de escaso crédito.

Catalunya desde sus propias convicciones está creando un nuevo Estado que se encontrará con todas las dificultades internacionales que son propias de un proyecto de este tipo, pero que poco a irá ampliando y marcando su senda sin atajos y más pronto que tarde será reconocido.

Sometidos por enormes circunstancias y quizás por esas mismas circunstancias están diseñando una forma de gobierno, una forma de República, que es más avanzada de lo que en principio hubieran soñado.

Seguramente que sin estas vicisitudes nunca hubieran tejido tantas complicidades que están trabando las voluntades como nunca antes se había visto. Sin duda, por esta conjunción de arrojos de la gente, no será una república burguesa y clasista, sino que estará basada en la igualdad y la convivencia de quienes quieran vivir en esa tierra, con todos los derechos básicos cubiertos por las estructuras republicanas.

El Estado español desde la quiebra social y moral y económica a la que le llevó la última crisis, se inició la recomposición sin ambages del franquismo en toda su extensión con la recentralización y en cuanto a Catalunya siguió con la estrategia mil veces practicada de:

- No sentarse a hablar ni ceder en nada.

- No hacer, permitir ni dar validez un referéndum en ningún caso.

- Alimentar a quienes no quieren la independencia con falsas expectativas aunque en lugar de crecer el número va menguando.

La realidad es que para Catalunya ser una República es una tarea tan ardua y tan difícil, como para quienes seguimos viviendo el régimen de 78, que a su vez queda constatado que es digno defensor de la bota del régimen del 1936. Una, grande y libre. Son muchos los muros que hemos de derribar algunos de ellos construidos desde hace siglos.

Lejos está la posibilidad de una República en Iberia confederada por muchas repúblicas distintas y asemejadas a sus respectivos pueblos.

 


75. El deterioro del Estado español.

Desde la crisis económica que deviene en los primeros años del siglo XXI, producto en buena medida del deterioro que se estaba dando a todos los niveles sociales y económicos trazados en arenas movedizas y en todas las estructuras del estado el Estado Español asentadas en los pilares del franquismo está mostrando ser un Estado inviable y fallido.

El Gobierno central desde hace años es incapaz de hacer frente a ninguno de los problemas que se le presentan. En todo caso los va dejando pasar para ver si el tiempo los soluciona o los transforma en problemas diferentes lejos de su responsabilidad y competencia.

El Congreso no sirve más que para que los autonombrados líderes y portavoces de cada partido puedan decirse cosas de gravedad pero con la condición de que luego en realidad no surtan ningún efecto. En realidad lo que se interpreta en la tribuna de madera noble solamente son juegos de artificios en los que se trata de atraer al público con grandes dosis de demagogia para ganar las próximas elecciones.

Todo el aparato de la Justicia con todo su entramado de boato e impertinencia está perdiendo credibilidad y legitimidad con pericia y obcecación, mostrado a la sociedad, ahora experta en tribunales, que lo que dicta en sus sentencias no tiene que ver con la realidad de la calle.

En esta caída libre, los hombres del Estado solo saben acaramelar a la población cada día vanagloriándola con piropos y grandezas en lugar de con humildad y reconocimiento de las dificultades. Estos adalides en lugar de tratar de marcar objetivos de cambio y mejoras reales, han concebido en sus estrategias que con la demagogia a espuertas hayan de solucionar con palabras lo que se va destrozando con los hechos.

El Estado español con todos sus dirigentes de izquierda a extrema derecha se ha convertido en un Estado inviable con una deformación grotesca de difícil explicación. Un desecho en la que los paganos son las mayorías sociales de cualquier tipo a pesar de que en la actualidad las manifestaciones, bien sean con motivos concretos, en realidad más que contra los gobiernos se estén volviendo contra el propio Estado.

Aunque la realidad es que los ciudadanos con indolencia y apatía,  con su votos y apuestas se están haciendo cómplices del deterioro.

 


69. La manada.

Quizás el caso de la manada y la violación de una chica entre cinco machos sea un buen ejemplo para poner negro sobre blanco la situación de la justicia penal y las realidades que hay que combatir en el enredo.

De la misma manera que este caso puede ser un buen pilar para la defensa de las mujeres ante la violencia machista también puede ser un pilar en el que poder sostener un debate positivo sobre la Justicia Penal.

Para evitar previsibles malas interpretaciones creemos que hay que considerar que los hechos significan una violación de la joven, incluso hasta en el caso de que en principio hubiera habido consentimiento.

 

  • En el proceso penal hay una frialdad y una predisposición para que entre los legajos y los secretos de sumarios corromper los hechos.

  • Los acusados ante el riesgo de ir a la cárcel durante muchos años en su defensa toman estrategias que atentan de nuevo contra la víctima.

  • En ningún momento se abren proceso de una justicia en el que se fomente un reconocimiento de la víctima por parte de los acusados.

  • En el procedimiento no hay previsto que en casos de este tipo haya posibilidad de un empatía y de un consenso en compensaciones y penas.

  • A la víctima se vuelve a poner de nuevo en la plaza pública. Se da un nuevo proceso insatisfactorio en el que no hay más que más dolor.

  • El tribunal está compuesto por tres personas. Quien no tiene un pero tiene un manzano y de algún miembro de este tribunal es notorio.

  • Los procesos son largos inciertos y si son mediáticos van cargados de exposición para todas las partes y a la sociedad confunde y alimenta.

  • Establecido en términos jurídicos el delito con intimidación que se ha cometido, se torna a caminar con pasos que no llevan a ningún lugar.

  • La participación de la sociedad en realidad sólo sirve para ver la contradicción entre el sistema penal patriarcal y usar más patriarcado.

  • La pena así impuesta, más larga más corta, nada soluciona: no avanza socialmente ni en la justicia feminista ni en la justicia siquiera.

  • Vamos a los lugares que nos señala el sistema del castigo patriarcal y llegamos a la venganza que es compendio del sistema patriarcal.

 

Siguiendo estos caminos quizás no logremos cambiar el mundo a mejor.

 


56. Los chicos/a de Altsasu.

La justicia impuesta al enemigo y aplicada sin rubor.

Porque aunque sea entre los pliegues de la realidad que se oculta  en la sociedad lo cierto es que existen en todas las partes del mundo muchas personas que pertenecen a ese segmento social al que el poder denomina “el enemigo” aunque nunca lo reconoce pero al que siempre le niega el pan y la sal y le muestra el yugo y el látigo.

Sucede que hasta que no lo vemos no lo sabemos ver ni entender.

En esta tierra estamos subyugados al poder, el poder prepotente que emana del alma castellana aquella que hace quinientos años ante la escasez de recurso de sus tierras alejada de la mano de dios y como queriendo alcanzarlo, se lanzó a crear un imperio en el que desde el principio trató al resto de los humanos como sus siervos y en todo caso como sus enemigos. Hoy día con argumentos arcaicos todavía estamos.

Todavía vivimos bajo el dominio filosófico de aquel imperio compuesto por aristócratas, terratenientes funcionarios y militares y se observa claramente en detalles como lo que está sucediendo con conocidos chicos de Altsasu: Oihan, Jokin, Jon Ander, Julen, Adur, Aratz, Iñaki Abad y Ainara. Puestos en la prisión por la Guardia civil y para los que un fiscal de la Audiencia Nacional pide una vida de cárcel.

Increíble la brutal petición de pena, cierta la realidad que vivimos.

Estos son los residuos democráticos que corren por las cloacas:

 

  • Leyes especiales pensadas para castigar a los malos e insurrectos.

  • Tribunales de composición bastardas para dar garantía de justicia.

  • Procedimientos especiales para saltar sobre la justica natural,

  • Jueces que interpretan las estrellas para ganar méritos políticos.

  • Estrategias judiciales vergonzosas con petición de penas increíbles.

  • Medios de comunicación callados cuando no manipulan y mienten.

  • Políticos/as en jarras mostrando su incapacidad e impotencia.

  • Y una población que encuentra satisfacción instintiva en el castigo.

Todos nuestros males vienen de las alcantarillas de Estado.

Por las cloacas desde las que se gobierna, en un país en el que ya no existe ni compresión ni la empatía para quienes no se identifiquen con quienes tiene el poder, solamente corre el odio y la venganza.

 

 

 


46. La Semana santa.

 

¿Por qué celebramos la Semana santa…?

 

  • Es una manera de organizar el trabajo y de tener vacaciones.

  • Somos católicos y hemos de conmemorar la muerte Jesucristo.

  • Es una cuota que impone la iglesia católica a la sociedad.

  • Porque les parece bien a los sindicatos de clase.

  • Es el punto álgido de la cultura en esta tierra.

  • No nos queda otro remedio.

    La Semana santa que vivimos en estos tiempos, no es aquella que nos obligaba a guardar silencio por la calle y a vivir unos días en medio de la compunción aquella semana de dolor que acababa con la resurrección de Jesucristo en la primera luna llena del mes de abril pero tiene más trascendencia social política y económica que la de entonces.

    Es difícil de explicar a cualquiera de los creyentes de cualquiera de las tres religiones que le rezan al mismo dios y que en el entorno en el que vivimos tienen su campo de batalla en medio de una guerra total social y religiosa de derechos adquiridos y prebendas, cada religión la percibe en las contrarias,  y que tratan sin rubor de copar la vida política social y festiva de todas las sociedades para no perder influencias.  

    La semana santa entendida así tiene algunas lecturas como son.

  • Dar gracias a dios por tener fiesta.

  • Gracias a la religión hemos mantenido nuestras tradiciones.

  • Animamos la rueda económica tan necesaria para el sistema.

  • Nos acostumbramos a formar parte del ganado acríticamente.

  • Seguimos alimentando mitos y mentira que no son asépticas.

    Al común de los mortales nos parece imposible que un día se pueda celebrar las semanas en las que nace la vida en primavera en vez de la Semana Santa calculada ahora con el calendario exacto judío.

    No hemos de tratar impedir que quien quiera organizar sus ritos y procesiones, aunque sea de manera pública, pero sí que hemos de restar fuerza a esa imposición milenaria de los ritos que las iglesias y religiones han introducido en las costumbres sociales y que más que mirar el calendario para ver cuándo cae la Semana santa, lo miremos para ver cómo cae la primavera y dónde encajamos diez días de fiesta.

 


37. Prisión permanente revisable.

La manera de pensar en torno al castigo, tanto en lo que predispone a la población y dispone las leyes, define claramente cómo ha sido una sociedad en el pasado, cómo vive el presente y cómo planifica su futuro  desde el punto de vista de quienes tienen el poder.

Los instrumentos de fondo en torno a esta cuestión la forman:

• El poder de meter miedo para que la población quede agradecida por sus servicios y los pida encarecidamente.

• La información que llega de los medios de comunicación, sin que nada se pueda hacer para evitarlo por los intereses que alimenta.

• La predisposición de las personas a que el ojo por ojo diente por diente sea efectivo en aquellos que son malos de solemnidad.

Cuando se quieren endurecer las penas, para lo que siempre se aprovechan episodios que se han hecho populares gracia a los medios de comunicación, la justificación que se hace se establece como respuesta a alguna contradicción de este tipo:

Si le pasara a tú hija ¿no querrías que pasara su vida en la cárcel...?

Quizás la provocación se podía devolver de esta otra manera

Que no sea tu hija la que un día mate... ¿a ver si entonces tú, piensas igual que lo que piensas ahora y quieres que tu hija pase su vida en la cárcel...? ¿para qué...? dirías y quisieras cuidarla tú misma.

Dicen que un persona condenada y encerrada en una prisión cuesta a la sociedad tres mil euros al mes, treinta mil euros al año… más de un millón de euros para cumplir toda la condena. Si a cualquiera que va a matar, que en ese momento de matar no se para a pensar en la prisión, le dijeran toma el millón de euros y no mates: no mataría nadie.

Mucho dinero entre unas cosas y otras, muchos puestos de trabajo entre policías y juzgados y toda la parafernalia para acusar y condenar.

¿Quién sabe qué saca la sociedad de que una persona esté toda la vida en la cárcel...? ¿Qué emana de positivo esta violencia sobre violencia que nos conduce al odio infinito...? ¿Esta condena satisface a las víctimas o se las está utilizando? ¿Qué le hacemos ver a quien ha cometido un grave delito, si lo sometemos a un castigo tan inhumano, que aunque siga con vida, es mucho más cruel que la fechoría que hizo?

 


30. Así no puede ser.

Hace unos días un joven de treinta y siete años fue encontrado muerto en su celda de la cárcel de Puerto de Santamaría III, a mil kilómetros de su casa. Allí estaba encerrado en primer grado, en aplicación de medidas especiales con las que se castiga a unos condenados por lo que dicen ser los crímenes más graves que existen y luego de ser sutilmente torturados para que ellos mismos digan de sus crímenes y así no tener que probar nada.

El muchacho tenía treinta y siete años.

Le condenaron por ser miembro de la E.T.A.

Dijeron, pero vaya usted a saber.

Veintiséis años de condena le cayeron

Que tenía unos papeles escondidos en su casa.

Ya llevaba cumplidos diez años encerrado con sus cosas escondidas.

Pero el joven ya no pudo aguantar su vida allí dentro, en una prisión de alta seguridad, aislado en una celda de tres paredes y una puerta, y con tres horas de patio al día, se buscó la vida para largarse.

Es difícil defender nuestra postura sin que nadie se disponga a acusarnos de criminales y de que somos también amigos de la violencia y enemigos de la justicia… y hasta hacer sentir el olor de los juzgados.

¡Pues no…¡

Así desde luego que no puede ser.

Se puede condenar a la organización E.T.A. con mil palabras.

Pero no se puede condenar a las personas con esa crueldad.

Se pueden condenar los atentados y las expresiones de violencia.

Pero no se puede condenar a las personas por no hacer nada.

Violencia, violencia, violencia gratuita.

Si hubiera buscado la policía y la guardia civil en las casas de jueces y magistrados, que intervinieron en esta condena, los papeles que pudieran tener en los que dictaron esta salvajada, a ellos también los pudieran haber condenado  con veintiséis años de cárcel. Con esos mismos papales en los que había escrito en los tribunales  las condenas.

Ellos sí que son culpables de violencia y de terror.

Aunque no lo quieran reconocer.

A la memoria de Xabier Rey Urmeneta.

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26. Por qué no puede reinar Felipe VI.

El rey es rey porque la Monarquía se cuela en la constitución en un artículo y con algunos otros la regula. Aparece como principal soporte de la Constitución porque el régimen franquista a la dinastía Borbónica la proclamó heredera del reino que había reinstaurado después de levantarse en armas contra la Republica, con el Glorioso Movimiento Nacional, de ganar una guerra y de haber llevado a las gentes a veinte años de miseria y otros veinte años de paz con feroz represión.

Hasta aquí, parezca bien o mal, poco hay que decir ni discutir.

Al parecer a Felipe VI todo el mundo le convenció cuando era niño de que en siendo mayor sería rey. Desde entonces nadie le ha llevado la contraria. En el momento de la verdad: M. Rajoy, Rubalcaba y Pablo Iglesias le dieron el último chaparrón de convicción.

Es difícil de entender cómo nadie pueda creerse esta componenda. Esa imagen en torno a la figura de la: Monarquía, la Casa Real y los reyes, princesas e infantes que la realidad es un negocio en el que entre pitos y flautas entre unos y otras pueden llevarse lo que quieran.

Aunque su padre campechano, cínico y pícaro ya sabía los que había y lo que se jugaba y ejercía de rey desde la idea primitiva de que para lo que le podía quedar en el convento se cagaba dentro, sin embargo este este hijo suyo se lo ha creído todo y que quiere ser: magnánimo, prudente, amoroso y rey de todos los españoles y se enfada cuando hay gentes que no nos lo tomamos en serio y algunas personas van a la cárcel por no creer en su bonhomía y en las virtudes de su casa.

Cómo pueden creerse el rey su destino, si llega al odio a sus súbditos o vasallos, si nos muestra su cara de cabreo y soberbia herida como si tuviera razón y nos habla en ese tono autoritario y severo.

Es que en realidad la Monarquía la están imponiendo por la fuerza,

Un padre capaz de poner sobre los hombros de sus hijas, en plena infancia: la responsabilidad de ser los soportes de un país mediocre, con la vista puesta en los próximos setenta años, incluye este periodo el destino nietos que todavía no tiene, denota la capacidad intelectual que le han aportado todos los estudios con los que se ha preparado.

Hemos de poner especial empeño en que el rey no pueda reinar.

 


25. Es el fin de la Monarquía.

Ser republicano significa pretender la desaparición de la actual Monarquía con todo lo que significa en el equilibrio político del sistema que es tanto como pretender la caída definitiva del propio régimen.

Es difícil entender qué significa la Monarquía en este entramado.

Una Monarquía que por todos los medios, los poderes que se dicen democráticos, y sin entrar en los costes de todo tipo que ha significado, han hecho creer a la población que es la institución garante de su felicidad y de su buen a vida y que sus siervos: reyes y príncipes, están allí para lo que haga falta, para lo más difícil.

Hay que ser mentes perversas para pergeñar todo esto.

No han llevado a una situación  en la que ya no sabemos qué hacer con tantas: calles y plazas, colegios y hospitales, pabellones deportivos y museos, que llevan los nombres de Juan Carlos, Sofía, Felipe… Están  por todos los lugares como si tuvieran algún mérito para que se asentaran en la mente de la gente común y que se hiciera irreversibles.

Cuánta baba y cuánta desvergüenza, cuánto engañar a las gentes y hacernos tragar con ruedas de molino. Se muestra claramente que es una forma de control social con intereses tan ocultos que no son fiables.

En los últimos años en los que la corrupción era tan palpable y la Casa real se encontraba en el centro de todas las críticas aparte de las que se trataban en lo juzgado que parecía estaba todo dispuesto para que cayera pero la realidad es que muchas voluntades flaquearon.

En estos últimos tiempo ha sucedido que en lugar de empujar quienes tendían haber empujado, aquellos republicanos socialistas que perdieron, en realidad han sostenido a esta Monarquía infausta cuando más necesitaba de un  sostén, y es muy posible que en este trance haya caído la historia y la realidad histórica más de treinta años hacia atrás.

El régimen trata permanentemente de recomponerse pero la realidad es que ya no se puede soportar de ninguna manera y hemos de seguir con las tareas de deslegitimación y el trabajo de procurar una alternativa republicana que cambien la Historia de esta tierra y de sus gentes. Hemos de saber salir de esta ciénaga en la que nos metieron quienes siempre nos hicieron ser lo que ellos quisieron que fuéramos.

 


22. Es viable el régimen de 78.

El régimen supuso una entente territorial sobre todo con vascos y catalanes que se vio trastocada por el 23/F y luego por la LORAFNA, y que ahora con la crisis catalana ha roto todas sus costuras y quedan remarcados los límites por los cuales: todos los territorios son españoles y las instituciones de esos territorios también son españolas.

También consistió la aceptación del régimen de un pacto de rentas por el cual las rentas de trabajo tuvieran mayor participación en el devenir económico y sin embargo no solo han bajado incluso con la participación de la mujer sino que en el interior de las rentas de trabajo las diferencias que entonces se podían situar de quien menos ganaba era 1 y el que más ganada eran 3, en la actualidad son al menos de 1 a 6.

Un pacto de que la voluntad de población manifestada en las elecciones fuera soberana en una mar de separación de poderes. Pasados cuarenta años la realidad es que la voluntad de la población está manipulada y mal medida y los poderes públicos se han elevado a lugares incontrolables para la población y vegetan escondidos tras una compleja y laberíntica red de leyes y la separación de poderes se ha convertido en un concepto en el que nada significan las palabras.

Posiblemente que para estas fechas el régimen haya tocado fondo y vaya a ser sustituido por otro nuevo que ya se está dibujado desde hace tiempo. Ahora como antes serán las fuerzas más: inflexibles, totalitarias y autoritarias las que marquen el camino.

Un nuevo pacto territorial tratará de cercenar los derechos de los diferentes sin que nada tenga que ver con la igualdad de las gentes.

El cambio de concepción de lo que significa el trabajo hará que las diferencias de las rentas por la parte baja se sigan ampliando y abriendo las diferencias más grandes incluso entre quienes viven de su trabajo.

Y la democracia pasará a mejor vida porque todas aquellas leyes que sirven para reprimir la acción social de la gente en la calle y en las redes sociales: al margen y en contra de todos los poderes establecidos, se hará cada vez más heroica y escasa.

Un nuevo régimen que el mayor castigo que va a imponer es un castigo económico a quien se salga o se oponga a su telaraña.

 


21. Vivimos en un estado democrático…?

En apariencia SÍ.

Una democracia formal que se ha quedado sin fondo.

En realidad NO.

Los poderes facticos con los que cuenta el Estado la han sustituido.

Sencillamente, lo que existe en el Estado español lo podemos considerar como una democracia asimilable con el resto de las democracias del entorno, pero con la diferencia de que entre los políticos profesionales que la dirigen es muy difícil encontrar demócratas y su mejor hacer es dejar pasar las cosas sin ir más allá de la legalidad vigente y esa legalidad está asentada en los pilares franquistas.

La realidad es que todo el entramado de leyes que se fabricó hace cuarenta años desde la Constitución a las estructuras y las instituciones del Estado, todo está todo trucado y entrelazado de trampas.

 

  • La Ley electoral que garantiza que el valor de cada voto sea diferente según la población y las circunstancias electorales.

  • La circunscripción electoral y la adjudicación de representantes está pensada para que aquellas minorías que viven en las zonas menos pobladas, donde al parecer se guardan las esencias patrias tenga un peso desproporcionado en la suma de representantes.

  • La mayoría necesarias para los cambios de leyes orgánicas.

  • Los procedimientos exigibles para mover una coma.

    Y por otra parte nos encontramos que cuando quien tiene esa mayoría que siempre es relativa quiere: nada tiene importancia.

  • Se puede cambiar la Constitución en una noche.

  • Se pueden interpretar las leyes a servicio de cualquier antojo.

  • La corrupción puede campar a sus anchas y sus responsables políticos seguir gobernados y decretando lo que les venga en gana

  • Se limitan derechos públicos sin que se pueda hacer por evitarlo.

  • Los medios de comunicación de masas en buena medida en la quiebra económica han caído también en la quiebra profesional más absoluta y han hecho de la libertad de prensa un imposible.

Todas estas circunstancias seguramente sirvan para dar estabilidad a determinado estado de cosas pero en realidad no son democráticas.

 


20. Sigue vigente el franquismo.

 Se ha extendido la idea de que el Franquismo hace tiempo que ha pasado a la ciénaga de la Historia pero estamos convencidos de que no son más que ganas indisimuladas de engañar a la gente.

 El Franquismo en aquellos años que llamó de paz, pero que en realidad fueron los años de asentar la victoria del Glorioso Movimiento Nacional, cuando con el beneficio de la victoria construyó y asentó las estructuras sociales y políticas del régimen, levantó los ocho pilares básicos de su pervivencia y que a día de hoy son intocable e inmutables.

 España y su unidad sagrada para la que el régimen se dispone a asumir cualquier coste incluso una guerra solapada en Catalunya

 La Iglesia Católica y su transcendencia divina a la que el Estado le sigue alimentando económica y socialmente hasta el empacho.

 La Monarquía con su cohorte de nobleza secular que está demostrando ser la garante y el guardián de vaso de las esencias patrias.

 Las fuerzas armadas que en medio de loas y aclamaciones están integradas en la conciencia social aunque alerta contra la población

El entramado económico de los vencedores de la guerra cuyas familias todavía suman réditos de todo aquello que consideraron suyo.

 Los sindicatos verticales en torno al Fuero del trabajo y que hoy permanecen tal cual haciendo su tarea engranados con el Estado.

 Las fiestas populares y castizas de exaltación local y nacional, de carácter religioso y machista, muestra de la degradación y la incultura.

 El mantenimiento de la pobreza moral y económica en base a: escasez de formación, la ignorancia secular y las mentiras endémicas.

 

Estos pilares fueron alicatados y consagrados por la Transición por los herederos de Carrero Blanco, independientemente que se dijeran de izquierdas o de derechas, todavía están vigentes y están arraigados hondamente en las interioridades sociales  y con sus valedores a destajo.

Tras años de terror y miseria primero, de grandilocuencia y de pretensión luego, en estos días el régimen franquista parece que se resquebraja y en ese verse en el abismo han caído las caretas de sus soportes y lo quieren rehacer a toda costa. A esa maniobra no debemos de oponer con todas nuestras fuerzas.

El régimen no puede ir a peor.